martes, 9 de agosto de 2011

Ser uno mismo

 Al entrar en los estudios  esotéricos lo más importante no es lo que dicen los libros o determinado instructor, sino el grado de verdad que éste representa, de ahí la capacidad para discernir entre la verdad, la verdad parcial  y lo falso.

A medida que profundizamos en el estudio esotérico, surge dentro de nuestra consciencia una nueva perspectiva de  la vida. Este nuevo conocimiento interno, conlleva una mayor responsabilidad en lo externo.
Cuando hacemos un balance de nosotros mismos, deberíamos recordar que la comprensión llega aplicando al medio ambiente  inmediato el grado de verdad   captada, y que la consciencia se expande empleando la verdad impartida.
Una vez hemos reconocido cual es nuestro camino, ya nada nos apartará de él si somos perseverantes y sabemos permanecer inconmovibles ante todo lo que pueda acontecer en nuestras vidas.
Este camino elegido, nos puede conducir hacia metas insospechadas, a una nueva dimensión y a un estado de ser, conocido subjetivamente. Este estado de comprensión produce cambios en la forma y en el medio ambiente, comparables a su poder.
Si en las enseñanzas esotéricas nos mantenemos libres de toda autoridad extraña, dejaremos de ser como rebaño de ovejas, siempre listas a obedecer. Ningún personaje por muy autorizado que nos pueda parecer,  puede decidir por nosotros como hemos de andar el camino.
Ser uno mismo implica hacerse preguntas, y buscar las respuestas en nuestro interior  sin esperar a que alguien que creemos autorizado nos las responda.
La solución a las  crisis que afrontamos la humanidad y en conjunto todo el planeta, deben surgir de la capacidad creativa y dinámica de aquellos que se interesan el el mayor bien para el mayor número de seres que habitan la Tierra.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias Marta por estar de vuelta con nosotros.
Mantenernos fieles en nuestro árbol particular dentro del bosque hará que veamos la luz de nuestra alma.

Esperamos que ese estudio iniciado sea de gran provecho para todos.


Besitos.

Sandra Figueroa dijo...

Hola Marta, me gusta el esoterismo, el misterio, todas esas cosas, pero no soy constante en las lecturas. Creo que es muy importante ser yo misma. Te dejo un beso, cuidate mucho.

Marta dijo...

Gracias a vosotras per estar aquí.
Lo importante creo que no son los estudios sinó aquella parte de verdad que vamos descubriendo en nuestro interior.
El esoterismo que trato de impartir,en principio nos puede parecer misterioso, pero a medida que vamos descorriendo los velos que ocultan la realidad interna, dejan de ser misterios para convertirse en realidades.
Un beso